Motivación

Dos de cada tres pases los hacés mal, aprovechá a jugar bien porque hay más jugadoras para tu puesto, estás errando mucho, estás controlando mal, te está costando. 

El poder de las palabras, no quiero decir nunca más algo por decir. Quiero cuidar cada adjetivo, imperativo y gerundio sabiendo que cada uno impacta, sobre todo minutos antes de un partido. A veces siento que somos mucho más máquinas de lo que pensamos, los gestos, las palabras entran como funciones programáticas directamente al cerebro y se filtran por las fibras de nuestro cuerpo, se procesan y ejecutan mientras nos vemos muy tranquiles tomando una birra al costado del río. Toda esa data se ejecuta constantemente: Agarro la lata de cerveza errando dos de cada tres pases, camino al súper controlando mal, discuto mientras me está costando. Se filtra todo, absolútamente todo y un día explotamos en llanto sin saber por qué o nos chocan queriendonos sacar el puesto y escupimos un: PASO YO LA RECONCHA DE TU MADRE. Estamos transpirando la respuesta a cada una de esas palabras que nos vinieron a lacerar el autoestima porque sí. Somos un continuo de frustraciones heridas, perpetuadoras infinitas del dolor, repetidoras incansables del temor a ajeno.